Tantas luces me han guiado... Y el enorme camino que he podido recorrer se ha borrado de un recóndito mapa. Lo más garboso, es que no he acabado mi destino; Es más, me he anclado tan sólo en el principio.
Señales de humo invaden mi vista, pero los demás no pueden alcanzar mi protección. Las nubes se forman con tan sólo imaginarlas, y un aire temiblemente frío recorre mi cuerpo como un alarmante escalofrío comenzando desde las puntas de los dedos de mis infortunios pies.
Suelen decir, que todo humano puede deshacerse de sus problemas, puede solucionarlos y vivir sin ellos. Pero me pregunto, que si aun no habiendo enemigos y dándome cuenta que el problema soy yo misma, se pueda resolver sin que el propio yo resulte dañado o simplemente, termine sin vida.
Razones pesimistas invaden mi pensamiento, no estoy engañando a nadie. Toda persona, necesita un pequeño rincón en su mente, para guardar las ideas que no necesitan conocer los demás; Lo personal, lo íntimo. Sin embargo, yo misma, sin la ayuda de nadie, me he acostumbrado a guardar todo tipo de pensamientos en ese rincón, sin contar con el auxilo que produce pronunciar palabras en busca de oídos ajenos. Mi relojería ha estallado, y cada vez que alguien toque, aunque sólo sea de refilón una diminuta pieza, salto por los aires, y cada vez, más alto y con más fuerza.Ya no puedo ni controlarme a mí misma; No puedo tomar decisiones, carezco de concentración.. todo eso ya me viene demasiado grande. Estoy obsesionada con el fracaso y con el futuro que me espera, cuando estoy dejando pasar el presente de la peor forma que sé. Lo peor de todo esto es, que soy consciente de ello y me siento mucho más idiota al no saber como solucionarlo.




No puedo soportarlo más...

Existen momentos en los que hay que oprimir fuerzas... A tragar.

No somos nadie; ¿Acaso todo esto no es más que una contradicción?; Repito, ¿qué somos? ¿Acaso no somos alguien?
El mundo nos rodea con sus sarcasmos, ironías e incoherencias. Está idealizado así, y por mucha lógica que le busques, no te servirá para nada si los demás no saben escuchar. Nos perdemos entre tanta pregunta, y respondemos sin entenderla bien; Sus consecuencias no son sólo perderse aún más, sino desconfianza y escepticismo.
¿No lo sabéis? A raíz de una simple creencia puede aparecer un inamovible negocio. Si hay algo en este mundo completamente veraz, es que los humanos somos al 99% manipulados y al 1% manipuladores; Desgraciadamente, sólo los que utilizan la lógica y un poco de sentido común, desechan las 99 posibilidades y viven de una única probabilidad. Y pensemos, pues, ¿qué adjetivos se le atribuyen a tales personas cuando nos cercioramos de lo que está haciendo? .. ¿Falsos? ¿Imbéciles? ¿Hipócritas?; Os engañáis a vosotros mismos una vez más. Saben perfectamente lo que hacen, no guardan apariencias; Piensan con cautela lo que van a hacer, está claro que si estás siendo manipulado, es porque no ha sido para nada imbécil y ha sabido controlarte como le ha apetecido desde el principio. Cometen sólo un único fallo, y es desvelar su inteligencia sobre quién sea; Ellos serán imbéciles por ello, pero nosotros, que hemos caido en todas y cada una de sus mentiras, lo somos 99 veces más.

O aprendes a jugar con astucia atribuyéndote el propio papel del rey aún sabiendo la existencia del jaque mate, o actúas como un simple peón para protegerle como le apetezca; Porque no gana el que sabe jugar, sino el que sabe darse cuenta de las debilidades.



Uno, dos y a correr.

De letras.

Comodidad más bienestar, satisfacción. Satisfacción entre impetuosidad, asombro. Asombro por inseguridad, aflicción. Aflicción más tortura, desesperación. Desesperación entre quietud, serenidad. Serenidad menos indiferencia, preocupación. Preocupación más ansiedad, desequilibrio. Desequilibrio más propósito, interés. Interés por optimismo, alcance. Alcance menos desánimo, euforia. Euforia entre civismo, apropiado. Apropiado más entusiasmo, aficción. Y aficción es igual, a solución.

Y tú?

Locos somos quienes vivimos en nuestro mundo... personas que somos diferentes de los demás, y nosotros, los nadadores, nos diferenciamos de los otros deportistas porque estamos locos, somos masocas del deporte, del dolor, de la fatiga...

Yo te puedo decir que si lo estoy. Desde hace mucho tiempo me di cuenta que era diferente a los demás. Lo mejor de todo era que había otros que tenían los mismos síntomas que yo. Cuando decidí ser nadadora y entrenar mis primeros kilómetros al día, me dijeron mis amigos que era algo fuera de lo normal. Al ver que no iba a fiestas, me decían que estaba loca, por entrenar los fines de semana que estaban hechos para descansar y para actividades sociales. Gente en coches de madrugada... y a quienes se les hizo "temprano" salir de la fiesta. Y nosotros apurados en llegar temprano al entreno... Si supieran las pocas horas que dormimos se dirían a si mismos: "estos locos..."
Cuando estamos a menos de 13 grados, está lloviendo, hace aire, pero todavía faltan 10 de 200 con 30 segundos de descanso, seguramente dirían que nos falta un tornillo. Cuando comemos 6 veces al dÍa y no le metemos chatarra a la comida, es un ajuste de nuestra personalida obsesiva. Llamamos dieta a comer y no a dejar de hacerlo. Cuando salimos de viaje, lo primero que nos pasa por la cabeza es preguntarnos: ¿Dónde podré nadar?. Preguntas lo mismo en recepción y el encargado te mira como con falta de cordura. En ese mismo viaje, al bajar a comer, revisas el menú en busca de pasta, sino la hay, preguntas si es posible ese plato. Al hacer las maletas, lo primero que pones en tu mochila son los bañadores, las gafas y el gorro y luego lo demás por si se te olvida lo otro.
Estamos locos, según algunos que no entienden que en vez de ir a una fiesta preferimos ver una retransmisión de alguna competición. Nos quedamos embobados aunque los medios solo le den 30 minutos de lo que para nosotros es nuestra vida.
Somos masoquistas al disfrutar del dolor. Y que, ¿Soy una loca si digo que por mis venas no corre sangre sino cloro? Pero como el picante, esto es solo para poder ponerle sabor a nuestras vidas.
Soy una loca que me encontré con esta disciplina donde dar vueltas a un ollo de 25 o 50 metros era y es una extensión muy importante en mi vida. Soy una loca que encontré en esta disciplina que participar era lo más importante, pero que el llegar delante de mi siguiente competidor me daba otra razón más para seguir y entrenar mas duro. Soy una loca que ve pasar su vida en menos de un segundo cuando el juez de salida da el "preparados" y siente que toda la adrenalina explota en ese momento.
Comparado con los triatletas estamos 3 veces más locos; nadamos igual, entrenamos más que un ciclista y tenemos más resistencia que un corredor. Pero es lo que quiero ser, una loca que ama lo que hace, y ese dolor bendito de cada día, es la energía que me levanta cada mañana y me hará disfrutar de las mieles de la victoria el día de la competición.


No somos como los demás, somos NADADORES, somos los mejores.
Soy nadadora y sí, ESTOY LOCA.


y tú?

A mi salud.

Aunque no te importe... Hoy estoy triste.
Me siento tan mal... Y la cuestión es el no saber por qué estoy así.
Es tan frustrante que no paro de darle vueltas a algo que ni siquiera sé.
Busco, pero no doy encontrada la razón de este estado de ánimo tan bajo.
Es inexplicable de decir con palabras, aunque sepa cómo es el dolor que siento.
Será pena por algo... No sé, alomejor es un querer pero no poder.
La mente es fuerte, sí, pero difícil también.
Como un laberinto que no tiene ni salidas, ni entradas; y te sitúan en el centro de una nada.

Ausente es la palabra que me corresponde en estos momentos.
Si me hablas, no esperes mi respuesta.Porque no te estaré haciendo caso... Además, no me apetece hablar.
Quiero estar sola, como de costumbre.
A veces desearía no haber nacido... Porque a veces, pienso en cómo sería todo esto sin mí...

Pero creo que cuando encuentre lo que busco... Será el momento en el que le encuentre un sentido al menos a esta estúpida vida.

Y la gente me llama rara, aburrida...
Y la ignorancia... En estos casos es la mejor contestación, porque sé que para ellos, mi estado no tiene lógica dentro de sus cabezas, y no merecen una mala contestación, porque si me pongo en su lugar, lo entendería.

Pero hay una solución:
- Dejadme sola, sabeis que me gusta.
Y es estúpido, porque a pesar de saber más o menos todo esto... Y todo de diferentes personas... Sigo sin saber el porqué de mi silenciosa tristeza.
Pero mañana será otro día...
Supongo, aunque no me quejo de la soledad.


Y ahórrate preguntarme que me pasa.
Yo me trago mis problemas sola.

Uno, dos, tres.

Tres pasos separan mi cama de mi ventana. Tres pasos separan la realidad de la imaginación. Uno, dos, tres... El gris del cielo se tiñe del azul de mis pupilas, las nubes liberan a un sol radiante y caliente, un corazon herido encuentra una cura para su dolor, una chica insegura y temblorosa se convierte en una niña con toda una vida por delante y sin ninguna preocupación. Tres , dos, uno... El gris vuelve junto con las nubes, el corazón vuelve a sangrar y no hay cura para su hemorragia. La niña vuelve a convertirse en mi.




Solo tres pasos...

Difícil de comprender, imposible de creer.

La puerta entre abierta, el sofá dado la vuelta, la rosa que el me dió seca y sus petalos esparcidos por toda la habitación. Decido salir ya que no aguanto ver esa habitación vacía y sin ninguna pista de que hubieras estado antes allí. Cojo el coche y pongo le volumen a tope, por un segundo consigo dejar de pensar en ti . Derrepente te veo enfrente del coche, intento frenar y en un vano intento de derrapar choco contra una vaya publicitaria. No siento dolor. Salgo del coche y sorprendentemente sigues ahí, me abrazas. me coges de la mano, y mientras juegas con un mechon de mi cabello, me susurras lentamente al oido que me quieres y que siempre estás ahí aunque no te vea. Derrepente, noto una gran descarga eléctrica en mi dolorido pecho, abro los ojos y contemplo desolada la imagen que me rodea; una habitacion llena de médicos y enfermeras. Es entonces cuando comprendo que sigues muerto.

Esquizotípica.

Son los labios del amanecer los que acarician sus lágrimas resecas y, poco a poco, va despertándose del profundo aguacero en el que estaba sumergida. Sin darse cuenta, busca a tientas entre las sábanas. Después sonríe y abre los ojos; le brillan.¿Dónde están tus buenos días, mal educado? ¿Dónde descansa tu brazo si no es junto a ella? ¿Y la luna que un día le prometiste bajar? ¿Qué hay de los pétalos de esas estrellas que cazabas desde el mar? ¿Y el sonido de aquella nana que ya no le hace soñar?


Ella siempre camina mirando el suelo, por si ve tu rostro en las baldosas o en los charcos. Por si oye tu voz en los crujidos de las hojas o si lanza una lata y va a parar a tus pies. Y su vida se reduce al letargo de tu adiós, que reconcome sus pupilas sin permitirles observar la realidad. ¿Te has dado cuenta alguna vez? Es la música de tus latidos la que se inyecta en las venas y la nieve de tu piel en la que le gusta revolcarse. Ella tiene una solución para cada estación del año: si en otoño llueve mucho, bebe las gotas de tu saliva que caen del cielo; y si en primavera no nacen flores, planta las semillas de tus sonrisas. ¿Traerás más comida china para compartir? ¿Volverán los viajes en coche sin dirección predeterminada?Ella sigue su camino mirando el suelo.


Cuando se acuesta en la cama, cierra los ojos despacito y se imagina a sí misma allí tumbada, en la cama de su habitación. Después sonríe y abre los ojos; le brillan.
Suele fingir que te ve y levanta un brazo para acariciar el espacio vacío donde deberían encontrarse tus mejillas. Luego se acerca un poco más y se funde un abrazo incorpóreo, sujetando la nada entre sus brazos, sintiendo el contacto del abismo que os separa.
Suena la música de su llanto, sollozos silenciosos en mitad de una oscuridad. Y aunque ella no ve nada, finge que tú también sonríes y le acaricias el pelo.


¿Dónde te has ido sin ella?

¿Dónde está la vida?

- ¡Jane, espera! - gritaba inútilmente Paul.
Jane corría y corría calle abajo, sin detenerse, sin mirar hacia atrás. Corría con la desesperación acelerada en sus pies, que parecían volar con cada zancada. Sus jadeos rechinaban en su sien, se ahogaba y la garganta le pedía un respiro. Pero no había respiro para Jane, se estaba dejando la vida en aquella huida.
- ¡Jane, espérame! ¡Por favor! ¡Para!
Paul trotaba a una distancia considerable de ella, dando trompicones y con la vista empañada por las lágrimas. Pero no le importaba no divisar las calles, ni la calzada. Él sólo se fijaba en la borrosa figura que corría delante de él.
Gritaba desgarrándose la voz entre sofoco y sofoco aunque sabía que ella no conseguía escucharle. Sabía que no iba a llegar a tiempo. Sabía que esa sí era su última vez y se sentía engañado, atormentado, se sentía víctima y culpable.
Entonces, al llegar a la esquina, Jane se detuvo y se volvió para mirarle. Paul, a demasiados metros de ella, también.
Llevaba el pelo en la cara, revuelto, sudoroso y aún así, brillaban los reflejos dorados.
Paul miró aquellos ojos verdes en los que tantas veces se había perdido y supo que no volvería a verlos.
La fina lluvia bañaba las calles.
Ella había desaparecido, pero Paul volvía a correr calle a bajo hasta llegar a aquella esquina. Aquel horizonte que se la había llevado, aquel abismo.
La lluvia, ahora era un diluvio. El réquiem por un amor deshojado.
Paul miró al cielo completamente empapado y, tras escuchar el trueno que daba comienzo a la tormenta, llorando dijo:
- Yo también la echo de menos.

Querido diario . . .

A ciencia cierta ahora todo gira a mí alrededor. No sé exactamente quién soy ni que estoy haciendo, solo tengo clara una cosa.He estado llorando varias horas, ¿a causa de qué? Solo yo lo sé. No me siento mejor por haberlo hecho y tampoco creo que por ello nada vaya a cambiar, pero me he sentado y he decidido narrar una vez mas mi misteriosa vida, y con ella, como cada día, su dulce sinfonía.
Aproximadamente creo que he estado unas tres horas contemplando cada una de las fotografías que han ido marcando mi inicio hasta el día de hoy. ¿Y qué he encontrado? El principio de unos pasos, las caídas, risas y fotografías de ensueño. También se encontraban los recuerdos de mi infancia, que han ido aflorando en mi mente a la vez que el tic tac del reloj sonaba. Me atrevería a decir que he pensado en caer de nuevo en las redes del pasado, pero soy mas fuerte de lo que creía, y no he dejado que unas absurdas lágrimas pudieran conmigo. He malgastado poca de la energía que llevo en tirarme al suelo y pensar en lo que he sido. Y no con eso he encontrado explicación coherente a lo que me sucede. Es como si me hubieran encerrado en un frasco de cristal y en mitad de una playa, con el movimiento de una ola me hubiese marchado, agitándome de un lado a otro para intentar escapar. Como si me hubieran arrancado los pulmones en un suspiro, y todo el aire que tomo se quedase anclado en mis venas y lentamente me fuese haciendo desvanecer. Son sensaciones de agobio, frío...
He pasado largas horas escribiendo, y aún así no he encontrado la respuesta a mi absurdo problema. En cada papel había una frase, una palabra, y entre ellas no existía relación alguna. Quizá me siento perdida, no sé muy bien de lo que hablo, ni tampoco tengo sentido de lo que está ocurriendo. ¿Cuánto va a durar? ¿Horas? ¿Minutos? ¿Segundos? Me estoy agitando en un sentimiento sutil, algo muy lírico.Nunca me había costado tanto expresarme, enseñar lo que en estos momentos pasa por mi mente. Desearía que nada estuviera pasando. Que fuera yo quien eligiera, o que todo estuviese de mi lado. Pero siento que pierdo la partida y no entiendo que puedo hacer para frenarlo. Una, dos y hasta tres copas de alcohol no son las suficientes para que lo melancólico que recorre mis venas se esfume. Necesito un ejercito de medicina que haga que florezca, una sonrisa.Siento que me falta cariño, hay una parte en mi que no está completamente llena. A veces cuando me siento oigo muy bajito la llamada aguda de una voz. En ocasiones grita queriendo decir algo, necesita expresar lo que hecha en falta... pero en otras aborrece cada una de mis ideas y se manifiesta de maneras innecesarias. Ultimamente lo único que se de ella es que está tranquila, ha probado cosas nuevas que la gustan, pero no sabe decirme el qué. Por ello estoy perdida, no encuentro lugar al que caminar, ni tampoco veo sitio en el que encaje.Quizá mi destino sea perderme entre un ardoroso mar de llamas, y allá muy a lo lejos encontrar una salida, pero sabiendo que nunca la llegaré a coger. Quizá todo ahora este en mi contra, el viento no sople en mi dirección, y mis sentimientos no sean los correctos.
Tiempos de amor, de llanto. Me estremezco, hasta llegar a pensar cosas demasiado personales. Imaginación por mi parte, está claro. Pero de pequeña me dijeron que soñar es gratis, por ello, hace poco que has empezado ha aparecer en mis sueños. Miento, digo que soy igual que todos, pero los más cercanos sabemos que escondo algo, demasiado misterioso e inquietante. En ocasiones me encantaría hacer saber a las estrellas de mis problemas, gritarles una y mil veces lo que pasa por mi mente. Pero ahora ando perdida. Deberán ser ellas las que me griten mi camino, las que me guíen por la razón de la vida. Lloraré, y secaré mis lágrimas, y como si no hubiera sucedido nada, saldré a la calle. Y dependiendo de cómo vaya mi vida, sacaré o no una de mis maravillosas sonrisas, que ahora guardo bajo llave en un cajón, del cual solo tú tienes la llave.

Exclavitud.

Muchas veces el corazón se desgarra poco a poco, cada filamento se va desprendiendo de su compañero, y mientras yo hago sordos sus sonidos y finjo que no pasa nada, que nada me molesta, que no muero día a día, viendo como todo pasa ami alrededor. Viendo como todo se derrumba, como todos los sueños, ilusiones y echos, se desvanecen en el olvido. Como soy la única en recordar todo. Como nadie le da importancia a lo que antes muchos le dábamos incluso más de la que debería haber tenido. Como siempre lo nuevo llama más la atención.
Me da asco, repelús e incluso ganas de vomitar, como la gente traiciona, como la gente miente, como la gente juega con los sentimientos de los demas. Pero, aunque haya querido alguna vez, y esa persona me haya engañado, jamás derrame una sola lágrima por esos echos que deberían haberme causado dolor. Jamás he derramado una lágrima, por que alguna "amiga" me hubiese fallado. Jamás me ha molestado Soy neutra ante los echos que pasen a mi alrededor, tengo una capa que me protege o me hace incompleta. Muchas veces me doy asco, miedo y fastidio. Cuando me llaman falsa será por esto, porque me da lo mismo si te enfadas conmigo, me da lo mismo si me puteas, me da lo mismo si te lias con mi novio, me da exactamente igual. Pero si tu lloras, si tu sufres, si te putean o te engañan.. me pogo mal yo. Por ti, pero también porque mi corazón está ligado a tus sentimientos.
Esto no es amor, esto es exclavitud. Hacia todos, no una simple persona, una enconcreto... sino engeneral.

Monotonia.


Los días van pasando junto a la monotonía, uno después de otro.. A penas se diferencia el día anterior del siguiente, son como eslabones de una interminable cadena.. Te sientes vacío, como si realmente te faltara algo imprescindible en tu organismo. Hasta que, por fin, surge el cambio. Pero es tan inesperado, que ni siquiera te percatas de que está ahí. Y puede que incluso llegue el momento en el que, sencillamente, te aburra.
No sé por qué, pero siempre se me acaba la ilusión por casi todo. He llegado a un punto en el que, aún siendo una innovación reciente, la desecho antes de disfrutarla de verdad. Pero no llamaría excentricidad al intento de destruir una monotonía ya no tan elevada, sino una búsqueda de mi propio interés.. Afán de hacer cosas fuera de lo que denominan normal, porque una vida organizada, sin suspense, con pasividad, y predeterminada es imposible que llene a alguien lo suficiente como para sentirse vivo. Ahora bien, si hay personas que aún estando vivos, prefieren sentir que están muertos, es porque todavía no conocen lo que verdaderamente significa existir.

¿Nos preocupamos por vivir o vivimos por preocuparnos?

Odio al mundo.

-Dime por qué odias tanto esta vida y coincidiré contigo en que tienes toda la razón.
-La odio, porque es tierra de falsos e hipócritas. Donde la vanidad está a la orden del día y lo único que importa es estar perfecto y presentable para los demás, pulimos nuestro aspecto pero nuestra alma la dejamos con telarañas y mugrienta. Que el mas débl es el que debe de morir, es una ley que impera desde el comienzo de nuestra historia, y jamás le damos oportunidad de defenderse. El dinero es el que mueve el mundo y sin él no seríamos felices, es algo que nos inculcan desde pequeños sin darse cuenta, y desde la adolescencia nos dicen que quien tenga un cuerpo delgado y perfecto con una cara bonita será la que más oportunidades tenga en esta vida... es lo que más detesto. Pues desde hace mucho tiempo todo gira en torno al exterior de una persona. Y odio a la sociedad, que ve como pasan las cosas pero no mueve un dedo por cambiarlo, y cuando lo mueve, lo mueve en la misma dirección que el resto. ¿Por que no buscas tu camino en esta vida, en lugar de seguir al resto?

7 de julio.

A todos nos enseñaron de pequeños aquella canción de: 1 de enero, 2 de febrero... (8) sí sí, bonita canción... ¿cómo acababa?: "...6 de junio, 7 de julio, san fermín." Y luego, aplaudíamos diciendo: "Biennnn" y con una sonrisita en la cara. Bien, esa era nuestra época irracional, la época de críos, childhood o como le quieras llamar. Pero ahora estamos en la época racional; la etapa en nuestra vida en la que aprendemos a pensar y a comportarnos, en la que maduramos, y en la que sabemos elegir lo que está bien de lo que está mal.
Dirás: ¿para qué este peñazo de introducción? pues para eso mismo, para que te des cuenta de que no eres un niño, y que ya sabes diferenciar lo bueno de lo malo.
Hasta ahí la teoría, ahora apliquémosla a la práctica. El día 7 de Julio, es un día que para muchos tiene un significado muy importante. Muchos (pero poco relevantes) son algunos de los acontecimeintos ocuridos un 7 de Julio: la Basílica Lateranense en Juanacatlán (Jalisco) fué construida un 7 de Julio, también las Islas Salomón se independizaron del Reino Unido, también los atentados del famoso 7-J en los trenes de Londres, también es el nacimiento del mítico Ringo Starr y también el fallecimiento de William Turner (botánico y ornitólogo inglés). Pero lo realmente importante que acontece un 7 de Julio, y que a todos nos debería preocupar, y la causa por la cual escribo este texto es por la celebración de las fiestas patronales en Pamplona de los san fermines.
[AHORA LECTURA OBLIGATORIA]
Los san fermines es una celebración que se realiza en el puto país al que llaman España, concretamente en la ciudad de Pamplona (Navarra). La parte de la fiesta más famosa es la de los encierros y, desgraciadamente, la parte más triste. Los encierros consisten en una carrera de 800 metros hasta la plaza de toros, en la que participan multitud de inconscientes y un número determinado de toros, unos 8 o por ahí (ese dato no lo tengo). Esto se realiza durante una semana más o menos, en la cual se preparan a los toros para las corridas, que previamente son privados de alimento para debilitarlos, se les aplica un ungüento en los ojos para nublar su vista, también se les administran drogas como tranquilizantes y estimulantes para que muestren bravura. Después de las corridas, los toros, obviamente, no se dejan a la vida... jáh, pardillo si te lo pensabas. Encerrados otra vez para ser aprovechados para una matanza o para un toreo en el que se acaba por llegar al límite de los límites del sufrimiento. Ningún argumento es válido para justificar la celebración de los san fermines, fiestas en la cual nos aprovechamos de nuestra superioridad sobre los animales y en la que limitamos la libertad de los toros. Porque ellos tienen sentimientos. Porque ellos tienen derechos. Porque ellos también son libres. Porque ellos no tienen que ser situados en nuestra diversión. Porque ellos NO LO HARÍAN. Porque no es justo...
Conciénciate, por favor, de que los sanfermines no son una fiesta, son un crimen. Se apoderan de la poca libertad que ya tiene un toro. No seas un inconsciente como ellos. Estás a tiempo de cambiar. Todos podemos conseguir cambiar la mierda de cultura que tiene este sitio. Sitio que para mí no tiene nombre.Para mí españa no existe. No quiero pertenecer a un país de asesinos.
Y ahora los de cuatro, después de volver a toda la puta gente facha de mierda, volverán a todo el mundo taurinos de mierda... Que se toman los san fermines como uno más, como la mayoría de la gente, como la masa popular ignorante... como lo que soys vosotros. La gran parte de la gente. Así va el mundo... una pena, lo sé.

Veo luces.


Siento la necesidad del recuerdo. De inspirar detalles a cada momento. De ver como pasa el tiempo sin que discurra. De contemplar estrellas, y deducir que en alguna de ellas no existe dolor alguno.La necesidad de sentir calor, se vuelve algo imprescindible. Mis sentimientos flotan sobre un mar formado por lágrimas, y el viento golpea mi cara en busca de un impulso hacia la felicidad.¿Mi recorrido? Es obvio que no es seguro, pero aquel bache me marcó. No me ando por las ramas, sé lo que quiero, pero también sé lo que no me conviene. Mi más sentido pésame, a las ilusiones y las esperanzas perdidas que dieron fruto de un simple impulso o una mera curiosidad.Todos desean que acabe. Pones punto y a parte, y pasas página; Pero siempre hay algo, que te hace retroceder.. Que te hace mirar hacia atrás y echar de menos ciertas sensaciones.Pero me niego; Me niego a añorar mentiras sin salida.. Esta vez, ni el viento puede pasar páginas.

Matemos personalidades.

Una persona puede tener un punto de vista, el cual no siempre tiene que coincidir con el de otros. Existe el propio criterio, los principios, la valoración...Pero...¿madurez?
Para mí, y desde un punto subjetivo, la madurez no existe. ¿Qué podríamos considerar como algo inmaduro? Pienso que cada cual es cómo es, y dependiendo de la persona que observe cualquier situación, se pueden deducir miles de cosas. Quizás para ti, la mayor importancia debe ser atribuida al saber comportarse o a tener un mínimo de conocimiento; Tal vez para otra persona, lo prioritario y esencial es su vida amorosa o su trabajo; Y así, podemos poner infinitos de ejemplos más.
¿Qué pasa? Que porque una persona no piense como tú, se comporte de tal manera, no tenga conciencia de lo que la sociedad hace denominar como loable y merecedor de tiempo... Di...¿Acaso éso es ser inmaduro? Si una persona es maleducada, no es inmadura, es que simplemente está malacostumbrado. Si un individuo se ilusiona por algo infantil, no es inmaduro, es que sencillamente lleva consigo sus propios gustos.Si alguien no acepta alguna situación que tú si asumirías, no es inmadura, es que básicamente los demás no son tú.A la imaginación de la propia mente está lo que denominamos madurez, porque que yo sepa, no hay ninguna escala con requisitos para ir avanzando. A cada cual le interesan distintas cosas, y no por nuestros gustos o acciones vamos a ser denominados así o asá, porque el que es estúpido, lo es, sin más.
La gente de ahora, suele luchar por mantener una etiqueta de madurez, y sin exagerar, puedo afirmar que el adjetivo “inmaduro” les resulta muchísimo más ofensivo que cualquier otro. Desean ser interesantes cuando solo se les ve un tema de habla forzado o disposiciones falsas; Puede que pretendan dejarte asombrado o maravillado por sus grandes dotes de razonamiento o ideas principales acerca de lo que el telediario de la televisión dice, pero en realidad, y no lo digo yo, si no la simple vista, la mayoría de las personas no saben nada acerca de lo que hablan, piensan o ejercitan sólo para resultar interesantes o atractivos en el ámbito de la personalidad.
La gente se deja arrastrar sólo para presumir de algo que en realidad carece.

¿Miedo a expresarse?


La mayoría de las personas tienen la extraña tendencia a callar las cosas bonitas que sienten por los demás. A veces porque se dan por sabidas, a veces por vergüenza, a veces porque se supone que exteriorizar los sentimientos es signo dedebilidad y, seguramente, debe haber muchas supuestas causas más. A veces se reprimen las emociones ante cosas bonitas.
¿Por qué? ¿A qué se le teme? Lo triste es que para expresar el desagrado, la ira, el odio, el desencanto y otras sensaciones negativas generalmente no existen las mismas limitaciones.
El ser humano debería revertir estos mecanismos, y así poder liberarse de fútiles ataduras que solo conducen al desencuentro y a la incomunicación. Y poder expresar las cosas bonitasque uno siente por los demás. . . y dejar que esas cosas broten como debe ser. Espontaneamente.
Porque es realmente triste que surja la necesidad de expresar los sentimientos cuando ya es demasiado tarde.Porque esas palabras que no se pudieron decir forman un nudo en la garganta del cual no podremos desembarazarnos jamás. Y surgirán remordimientos, cargos de conciencia y arrepentimientos.
Y todos sabemos lo difícil que es lidiar contra ellos. Pero tengamos en cuenta que evitar todo esto está al alcance de nuestras manos.
Y con varios suspiros en la boca miró aquellos recuerdos que felizmente vivió junto a aquellos que se atrevieron a ver más allá de unos enormes ojos verdes que siempre apuntaban al cielo.

Pintando el cielo.


Una vez le preguntaron a Lewis High, un fotógrafo de guerra, por qué había elegido esa profesión. Él contestó que si pudiese contar con palabras todo lo que veía, no necesitaría cargar todo el día con una cámara de fotos. Que ciertos momentos de belleza, de desolación, de horror y de heroísmo estaban más allá de las palabras. Yo también lo creo. Hay cosas que no podemos explicar con simples palabras, cosas como seguir vivos, sentimientos como el amor y el compromiso o sensaciones cómo volver a abrazar a un amigo. Quizá por eso nuestra vida se compone de imágenes, momentos congelados en el tiempo para siempre, de decisiones que cambian sin remedio el rumbo de las cosas, de fotografías fijas guardadas en la memoria, que nos recuerdan cada segundo lo hermoso que es vivir.

Miedo a las alturas.



Como cada trece de septiembre Samantha abre la caja de sus recuerdos, en las cual descansa una vieja carta arrugada por el paso del tiempo. Samantha despliega la carta , y aunque se la sabe de memoria la vuelve a releer. Paul como cada trece de septiembre se queda sentadito junto a Samantha. Mientras ella lee, él le dibuja nubes en su pequeño hombro derecho. Samantha hace años que superó la muerte de su madre pero cada trece de septiembre vuelve a leer la carta que su madre le dió antes de morir.
"Querida Samantha: No paro de preguntarme si estarás bien ahí, si serás feliz con ellos y si te tratarán como te mereces. Todos los días me acuerdo de ti y de las mil y una cosas que vivimos años atras. ¿Recuerdas cuando imaginabamos que la cama era un castillo y tu eras su princesa?. Como te encantaba ese juego, recuerdo como te reías cuando te ponía tus tacones de plástico y te hacía cosquillas. Aquí las cosas son muy difentes, nadie juega y todos echan de menos a alguien. Siento no haberme despedido pero a mí tampoco me avisaron de este viaje inesperado. Solo quiero que me recuerdes como cuando jugábamos a las princesas y que olvides todos mis días en el hospital. Recuerda que aunque ahora no estemos juntas te quiero y siempre lo haré. Si algún día no te encuantras bien contempla las nubes. Alguien las fabrica para todo el mundo, las mias, por ejemplo, las fabricaba tu padre. No tengas miedo a las alturas y llega muy alto. Te estaré esperando.
Te quiere mamá "

Me gusta.


Me gusta hablar, tener conversaciones amenas y escuchar historias. Me gusta quedarme hasta las tantas en el msn, tener una sóla conversación y que ambas personas contestemos al segundo de recibir la respuesta. Me gusta reir, hablar sola e imaginar acontecimientos con personas reales. Me gusta idealizar lo que quiero que pase, me gusta soñar y sorprenderme de lo que ocurre en mi pensamiento al despertar y cerciorarme de ese sueño. Me gusta escuchar pasos y oír el follaje de los árboles cuando hace viento. Me gusta mirar el cielo cuando hay blancas y pequeñas nubes que lo adornan. Me gusta ponerme las gafas de sol y observar a la gente sin que me vea. Me gusta sentarme en el último asiento del autobus y sentir cómo gira. Me gustan los abrazos, las caricias, los roces.. Me gusta leer libros y encontrar faltas de ortografías en ellos. Me gusta comer cuando me apetece, sentir que mi vida no se rige por horarios. Me gusta mirar por la ventana y ver mi reflejo a la vez que veo el exterior. Me gusta silvar cuando escucho una canción, sentir el ritmo y hacer gestos con las manos. Me gusta la sonrisa de los demás, las miradas de complicidad, el brillo en los ojos. Me gusta coleccionar las cosas que son más insignificantes para cualquiera, me gusta tener lo que los demás no quieren. Me gusta pasear y encontrarme una moneda. Me gusta hacer gestos con la cara y, por supuesto, me gusta ver la cara de los demás al verme. Me gusta ver películas de terror y sentir como se van acelerando los latidos de micorazon a la vez que avanza la pelicula. Me gusta comer cualquier guarrería cuando veo la tele, me gusta escuchar música cuando estudio. Me gusta dormir bocabajo, con dos almohadas.. Me gusta abrazar a una de ellas mientras pienso en la rallada del día. Me gusta decir expresiones que nadie dice, extrañas y propias. Me gusta tumbarme en el césped y sentir esa frescura. Me gustan los colores, la vida, la naturaleza. Me gustan los gatos, sus ronroneos, sus caricias. Me gusta andar sin saber a dónde, me gusta descubrir sitios, me gusta ver mundo. Me gusta mover el yogurt antes de abrirlo. Me gusta sacar la lengua mientras escribo. Me gusta saber que no lo sé todo. Me gusta levantarme por las mañanas y ver un mensaje nuevo en el móvil. Me gusta beber nestea, café y zumo de melocotón. Me gusta retintar con negro, me gusta subrayar y visualizar media página intacta. Me gusta escribir "lalala" por todos sitios. Me gusta decir "ssssh" en la biblioteca. Me gustan los cordones, los cinturones, los colgantes. Me gusta estar despierta cuando los demás duermen. Me gusta tener objetos de personas que me importan, tener cajas con recuerdos, descubrir textos de cuando era pequeña. Me gusta comer chicle de fresa, hacer pompas, el "plof" que hacen cuando explotan y que se te quede pegado en la cara. Me gusta comprar cosas que no necesito, me gusta entrar en tiendas aunque no tenga dinero. Me gusta masticar hielos. Me gusta escribir y mirar la sombra del boli. Me gusta perder para saber la técnica de los demás. Me gusta el sonido de las llaves y cuando se me caen al suelo. Me gusta probar cosas nuevas, descubrir nuevas facetas, conseguir otras preferencias. Me gusta observar el cambio de mi evolución. Me gusta predecir lo impredecible, me gusta observar los pequeños detalles, me gusta apreciar lo que me importa. Me gusta saber lo que hago, lo que quiero.. Me gusta saber lo que me gusta.